
De estos y otros temas estaremos hablando este sabado 10 de mayo en el Acelerdor de Empresas a las 2 p.m. en Clayton Edificio 234, en la primera reunion Masterminds.
Larry Page es uno de los dos creadores de Google, y ¿quiĆ©n mejor que Ć©l para hablar de cambiar el mundo? Para bien o para mal, Google no sólo influye en Internet, si no tambiĆ©n en ramas mĆ”s tangibles, como lo son la genĆ©tica, la cartografĆa, la exploración espacial, la TV, etc. Esta es una entrevista a Larry Page realizada por Fortune Magazine y traducida por un servidor, donde el principal tema es lo que se puede hacer para cambiar el mundo...
Entrevista a Larry Page
¿En quĆ© estĆ”s pensando en estos dĆas?
Si le preguntas a un economista quĆ© es lo que estĆ” impulsando el crecimiento de la economĆa, dirĆ” que han sido los grandes avances en materias importantes, como la mecanización de la agricultura, la fabricación masiva, cosas de ese tipo. El problema es que nuestra sociedad no estĆ” organizada en torno a ello. Las personas no estĆ”n trabajando en las cosas que podrĆan tener ese tipo de influencia. Nos olvidamos que realmente importa que no tenemos que transportar nuestra propia agua; no es muy divertido caminar kilómetros y kilómetros para tratar de conseguir agua para luego llevarla de nuevo hacia casa. Y nuestra habilidad para generar agua limpia y accesible estĆ” basada en tecnologĆas bĆ”sicas. ¿Tenemos energĆa? ¿Podemos hacer cosas? Mi argumento es que la gente no estĆ” pensando de esa manera.
En lugar de ello, es como si fuĆ©ramos cautivos del mundo, y lo que pasa, pasa. Pero Ć©se no es el caso en absoluto. Realmente es importante si la gente estĆ” trabajando en la generación de energĆa alternativa, la mejora de los transportes, hacer que Internet funcione mejor y cosas por el estilo. Y pequeƱos grupos de personas pueden generar un impacto realmente enorme.
¿Cómo podemos incrementar el nĆŗmero de personas que hacen ese trabajo?
Hay algunas barreras. PermĆtaseme dar un ejemplo: en 2004 hablamos acerca del perfil de riesgo con respecto a la realización de nuevas innovaciones. Dijimos que harĆamos algunas cosas que tendrĆan sólo un 10% de posibilidades de generar mil millones de dólares a largo plazo. Pero no ponemos mucha gente en esas cosas; el 90% trabaja en otras cosas. Entonces no corremos un gran riesgo. Y muchas de nuestras nuevas caracterĆsticas vienen de esas inversiones riesgosas.
Incluso cuando empezamos con Google, pensamos "podemos fallar", y casi lo hicimos. La razón por la que empezamos fue que Stanford dijo, "vuelvan y terminen sus doctorados si no tienen éxito". Probablemente esa sola decisión causó la existencia de Google. No estoy seguro de si lo hubiésemos hecho de otra manera.
TenĆamos todo ese riesgo interno que acabĆ”bamos de inventar. No es que fuĆ©ramos a morir de hambre, o quedar desempleados, o no tener una buena vida, o lo que sea, pero uno tiene ese miedo a hacer algo nuevo y fracasar, lo cual es muy natural. Pero, para poder hacer cosas importantes, uno necesita superarlo.
¿Existen mecanismos que la sociedad, el gobierno o las empresas pueden poner en marcha para eso?
Absolutamente. Mira Silicon Valley, que ha sido el primer lugar en el mundo en hacer cosas por el estilo. Hay un montón de dinero disponible y un montón de personas animando a otras a correr riesgos. No sĆ© que habrĆamos hecho si hubiĆ©ramos estado en un ambiente distinto.
Por un lado, estƔs diciendo que eso es un problema. Por el otro, que se estƔ realizando.
No crea que sea asĆ de blanco o negro. La pregunta es ¿cuĆ”ntas personas estĆ”n trabajando en cosas que pueden mover la economĆa o la calidad de vida de la gente?. Mira, cuarenta mil personas por aƱo mueren en accidentes de trĆ”nsito en los Estados Unidos. ¿QuiĆ©n va a hacer que Ć©se nĆŗmero sea cero, o mucho mĆ”s pequeƱo? Tenemos gente trabajando en eso.
¿QuĆ© estĆ”n haciendo?
Trabajando en autos automatizados. Se puede ver ya esa tecnologĆa funcionando en algunos autos. Infiniti acaba de lanzar un coche que te devuelve a al camino si te sales del carril -lo cual es una gran fuente de accidentes-. AsĆ que estamos salvando vidas, y la tecnologĆa no es tan cara. Pero el nĆŗmero de gente queriendo trabajar en eso es muy, muy, muy reducido.
¿Por quĆ© ocurre eso?
Honestamente, estoy un poco desconcertado. Pero mi propia experiencia dentro de Google me dice que es difĆcil hacer que la gente trabaje en ese tipo de cosas, por el riesgo personal que sienten que estĆ”n corriendo. AdemĆ”s, no tienen el entrenamiento adecuado. Si dices que quieres automatizar un vehĆculo y salvar vidas, las habilidades que necesitas no te las enseƱa ninguna disciplina en particular. Lo sĆ©; estaba interesado en trabajar en la automatización de los coches cuando era estudiante en 1995.
¿El problema es que la gente le tiene rechazo a los riesgos?
Esa es una parte del problema, pero pienso que puede ser superada con educación, ambientación e infraestructura. Mi experiencia es que cuando la gente intenta hacer cosas ambiciosas, se preocupan por fallar antes de comenzar. Pero emergen todo tipo de cosas interesantes que son de gran valor económico. AdemÔs, en esta clase de proyectos, trabajan con la mejor gente y pasan momentos muy interesantes. Realmente no estÔn corriendo riesgos, pero asà lo sienten.
Como una compaƱĆa pĆŗblica, Ustedes tienen una obligación con los accionistas.
¿Cómo entra eso en juego cuando empiezan a designar recursos a proyectos especulativos?
En la prĆ”ctica, eso no es problema. Yo he dicho a toda la empresa, en repetidas ocasiones, "Quiero que la gente trabaje en inteligencia artificial", para que al fin y al cabo cinco personas lo hicieran. ¿Sabes una cosa? Eso no tiene gastos importantes. Hay una razón por la que hablamos de "70/20/10", donde el 70% de nuestros recursos se gastan en nuestro negocio principal y el 10% va a parar a proyectos no relacionados, como la energĆa o lo que sea (el otro 20% se destina a proyectos adyacentes a la actividad principal). De hecho, es un desafĆo lograr usar ese 10%. La gente puede pensar que estamos desperdiciando el dinero, o lo que sea. Pero es de allĆ de donde vienen todas las cosas nuevas.
¿No es esto mĆ”s fĆ”cil de hacer en un lugar como Google que, por ejemplo, en las compaƱĆas de Fortune 500?
Muchos dirigentes de grandes organizaciones, pienso, no creen que el cambio sea posible. Pero, si observas la Historia, ves que las cosas cambian, y si su negocio es estĆ”tico, es muy probable que tengan problemas. Mira la industria automotriz: a los japoneses les costó convencer a la gente de que podĆan tener un coche fiable. Luego comenzaron a hacer los ciclos de producción mĆ”s cortos y mĆ”s cortos. En lugar de hacer un coche en cinco aƱos, lo hacen en uno o dos aƱos. Eso es un gran cambio.
Y después tenemos cosas como la Ley de Moore ("el número de trasistores en un chip se duplica cada dos años"). La gente cree que la Ley de Moore es una descripción de lo que estÔ pasando. Pero en realidad es la Ley de Moore la que impulsa a la gente a hacer lo correcto. Todo el mundo se organizó alrededor de ella, haciendo las cosas mejores y mÔs rÔpidamente.
Entonces, si hubiera Leyes de Moore aplicables a otras empresas o productos, ¿las personas se organizarĆan mejor para cumplir con ese objetivo?
SĆ, sĆ. Diferentes cosas se resuelven por diferentes razones. Obviamente, no vas a obtener la Ley de Moore del rendimiento de los automóviles -no sólo estĆ”s manejando información-. Con los coches, tiene limitaciones fĆsicas.
¿Tiene usted otros ejemplos donde el liderazgo innovador pueda marcar el rumbo?
Creo que en un montón de Ć”reas. Puedes ser un poco detective y preguntar ¿cuĆ”les son las industrias donde las cosas no han cambiado mucho en cincuenta aƱos? Hemos estado buscando un poco de energĆa geotĆ©rmica. Y empiezas a pensar en ello, y dices: Bueno, un par de kilómetros en este lugar, o en casi cualquier otro lugar del mundo, son bastante calentitos. Hemos estado excavando por mucho tiempo, generalmente por petróleo -que es caro-. Si deseas trabajar con el calor, hay que hacer otro tipo de agujeros. La tecnologĆa para la extracción de calor aĆŗn no ha sido desarrollada. Imagino que hay bastantes buenas probabilidades de que sea posible.
La energĆa termosolar es otra Ć”rea en la que hemos estado trabajando. Los nĆŗmeros son simplemente asombrosos. En el sur de California, o en Nevada, un dĆa con una cantidad promedio de sol puede generar 800 megawatts en una milla cuadrada. Y 800 megawatts es en realidad muchĆsimo. Una central nuclear ronda los 2.000 megawatts.
La cantidad de tierra necesaria para abastecer de electricidad a todos los Estados Unidos serĆa de unas 100 millas cuadradas. Me dirĆ”s: "¿quĆ© necesito para generar esa energĆa?" Puedes comprar cĆ©lulas solares. El problema es que, al costo actual, necesitarĆas billones de dólares para generar tanta electricidad. Luego dirĆ”s: "bueno, ¿cuĆ”nto cuestan los espejos?" Y resulta que puedes comprar espejos y cubrir toda esa Ć”rea por poco dinero. Por alguna razón, el mundo no estĆ” haciendo un buen trabajo en lograr que esas cosas sean posibles. Como sociedad, en el mĆ”s amplio sentido, no estamos haciendo progresos razonables.
Entonces, ¿piensa Usted que la energĆa geotĆ©rmica y termosolar pueden solucionar nuestros problemas energĆ©ticos?
SĆ, probablemente cualquiera de ellas pueda generar toda la energĆa que necesitamos. Pero no hay actualmente una disciplina para lograr esas cosas. Y, ademĆ”s, estĆ”n el desinterĆ©s, el miedo al riesgo y la falta de creatividad. Como que todo eso conspira. TambiĆ©n es una asunto de oportunidades, todo el mundo dice que Sam Walton estaba loco por construir grandes tiendas en pequeƱas ciudades. Casi todo el mundo que haya tenido la idea de algo revolucionario, o algo salvajemente exitoso por primera vez, es tildado de demente.
¿De quiĆ©n es la obligación de lograr que este tipo de cambios sucedan? ¿Es de Google, del gobierno, de Stanford, de Kleiner Perkins?
Creo que de todo cualquiera que se preocupe por avanzar en el mundo. Digamos que hay diez mil personas que trabajan en esas cosas. Si hacemos que sean cien mil, probablemente vamos a obtener diez veces mƔs progresos.
Y luego lo comparas con el nĆŗmero de ingenieros de Exxon, Chevron y ConocoPhillips, quienes estĆ”n tratando de exprimir la Ćŗltima gota de petróleo de algĆŗn lugar. Y todo el poder intelectual de la ciencia va a eso. Es totalmente desproporcionado en relación con el resultado que podrĆan obtener en otras Ć”reas.
¿QuĆ© clase de situación cree que es necesaria para impulsar este tipo de cambios?
Creo que necesitamos una enseƱanza de la ingenierĆa donde se puedan evaluar las alternativas. Por ejemplo, las pilas de combustible son una manera razonable de hacerlo, ¿o no? Para ello, necesitamos una bonita educación en ingenierĆa, y ciencia en general, que no es lo que ocurre tradicionalmente. AsĆ no es cómo yo me formĆ©. Yo me formĆ© como ingeniero en informĆ”tica. Entonces, yo entiendo cómo construir computadoras, cómo hacer programas. Pero aprendĆ por mi cuenta un montón de otras cosas. Si miras a la gente que tiene alto impacto en la sociedad, verĆ”s que ellos tienen un gran conocimiento general. No tienen realmente una educación particular en sentido estricto.
TambiĆ©n se necesitan algunas habilidades de liderazgo. Usted no quiere ser Tesla. Fue uno de los mĆ”s grandes inventores, pero esa es una triste, triste historia. Ćl no pudo comercializar nada, apenas pudo financiar su propia investigación. ¡DeberĆas parecerte mĆ”s a Edison. Si inventas algo, eso no necesariamente ayuda a alguien. Hay que conseguir meterse en el mundo, hay que producir y ganar dinero haciĆ©ndolo para poder financiarlo.
¿EstĆ”n ustedes conscientemente contratando gente que pueda hacer ese tipo de cosas?
Estas personas no existen realmente. No se puede contratar. Las personas suelen tener carreras donde permanecen en zonas bastante fijas.
Algunos de los inversores de riesgo se ven obligados a ser un poco mĆ”s generales en la forma en que evalĆŗan las cosas, y eso ha sido bueno. Pero todavĆa van mal. Mira la inversión de capital de riesgo en energĆa alternativa. Hay dos cosas que la causaron: el aumento del precio del petróleo y el calentamiento global. Principalmente el precio del petróleo.
Pero, piensa en ello. La mayorĆa del dinero va a las empresas que producen electricidad -y el precio de la electricidad se basa en el precio del carbón, que no ha cambiado-. AsĆ que la pregunta es: ¿por quĆ© no hicimos toda esta inversión hace diez aƱos? Ese fue un gran error. Es mĆ”s fĆ”cil si el petróleo es mĆ”s caro, pero no es especialmente una buena razón para no haberlo hecho mucho antes.
¿Es usted mĆ”s o menos optimista acerca del futuro de lo que era hace tres aƱos?
Soy enormemente mĆ”s optimista, porque ahora tenemos una conceptualización de los problemas que dan un cierto grado de sentido a un buen nĆŗmero de personas. Mira las cosas de las que nos preocupamos -la pobreza, el calentamiento global, las muertes por accidentes-. Y mira las cosas que hacen al nivel mĆnimo de felicidad de la gente -seguridad y oportunidad para sus hijos, ademĆ”s de cosas bĆ”sicas como la salud y la vivienda-. Creo que nuestra capacidad para lograr estas cosas a gran escala, para muchas personas en el mundo, estĆ” mejorando